Los inyectores de gasolina son componentes clave para el rendimiento de tu motor. Su función es distribuir el combustible de forma precisa y eficiente. Pero, ¿qué pasa si los inyectores están obstruidos, desgastados o dañados y no los cambias a tiempo? En Innyec te lo explicamos.
1. Pérdida de potencia
Un inyector obstruido no entrega el combustible necesario al cilindro. Resultado: el motor pierde fuerza, tarda en responder y gasta más gasolina.
2. Mayor consumo de combustible
La mala pulverización hace que el motor trabaje más para lograr lo mismo, provocando un aumento del consumo hasta en un 30%.
3. Fallas constantes al arrancar
Inyectores en mal estado provocan problemas para encender el motor, especialmente en frío o después de largos periodos sin uso.
4. Ralentí inestable y vibraciones
El motor tiembla, hace ruidos irregulares o incluso se apaga solo en semáforos o al detenerse. Esto indica que los inyectores están descompensados.
5. Daños en otras piezas del motor
La combustión ineficiente genera residuos que afectan válvulas, bujías, catalizador y sensores. El costo de reparar todo eso puede ser muy alto.
¿La solución? Diagnóstico y cambio oportuno con Innyec
En Innyec te ofrecemos diagnóstico electrónico, servicio de laboratorio para limpieza o reemplazo, y inyectores nuevos certificados para que tu auto funcione al 100%.
No esperes a que el motor diga basta. Revisa tus inyectores antes de que sea tarde.
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